El presidente Luiz Inácio Lula da Silva celebró el lunes (28) el informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que muestra que Brasil salió del Mapa del Hambre.

“Hoy dormiré con la conciencia tranquila del deber cumplido con mi pueblo”, dijo el mandatario en una conversación telefónica con el director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el chino Qu Dongyu. “Hoy soy el hombre más feliz del mundo”, celebró.

Lula afirmó que el día era especialmente feliz por la reducción de la inseguridad alimentaria grave y la desnutrición a menos del 2,5% de la población brasileña.

“La lucha para acabar con el hambre en Brasil es una misión de vida que tengo, es una profesión de fe”, afirmó.

El presidente destacó el desafío que enfrentó al retomar la presidencia en 2023, cuando 33 millones de personas en el país estaban en situación de hambre. Atribuyó al trabajo del gobierno federal y a las gestiones en los estados y municipios el éxito del Plan Brasil contra el Hambre.

“Ahora necesitamos un poco más de esfuerzo para que no haya nadie más (pasando hambre)”.

Expectativa

Lula aseguró al director de la FAO que el próximo año los datos serán aún mejores. Señaló que, en este último balance, se incluyeron datos de 2022, que “fue un año muy malo”.

Asimismo, argumentó que, para acabar con el hambre y la pobreza, es necesario incluir a los pobres en los presupuestos del país, de los estados y de los municipios.

“El día en que los gobernantes hagan eso, resolveremos ese problema crónico de la humanidad”.

Volvió a defender la distribución de ingresos como solución a la crisis alimentaria. “Solo así acabaremos con la desigualdad de salario, de género, de raza y de empleo”.

Lucha contra el hambre

El presidente reiteró que se considera un luchador contra el hambre en el mundo, un “soldado de Brasil y de la FAO”. Recordó que participó en las acciones junto al G20 para la alianza global contra el Hambre, que ya cuenta con más de 100 países participantes.

“No tiene sentido que algunos gobernantes estén gastando US$ 2,7 billones por año en armas y no gasten la misma cantidad en comida y en preservación ambiental”.

Lula lamentó, sin embargo, que 733 millones de personas pasen hambre en el mundo. “Es una vergüenza para los gobernantes, ya que el mundo produce suficiente alimento pero las personas no tienen suficiente dinero para acceder a la comida”, dijo.

Ejemplo

El director general de la FAO consideró que el resultado es “un gran logro” para el pueblo brasileño.

“Estamos muy orgullosos de poder anunciar durante esta reunión que, obviamente, el éxito de ustedes significa éxito para el mundo. Es la mayor población de América Latina”, señaló.

Qu Dongyu recordó que Brasil ya había salido del Mapa del Hambre en la década pasada y demuestra cómo el trabajo arduo permite superar esta situación.

“Brasil es un ejemplo de ello. Ustedes también están ofreciendo una oportunidad para que otros aprendan de ustedes. Por eso, me gustaría felicitarlos”.

Crédito arquivo Nacional EBC